Tras los resultados obtenidos en las trampas de monitorización de la procesionaria, situadas entre 100 y 200 metros sobre el nivel del mar, en las localidades de Llombai y Catadau, el máximo de capturas de polillas ha sido durante la segunda quincena de agosto.

Por lo tanto, en zonas de similares características ambientales, se recomienda realizar los tratamientos mediante endoterapia, desde principios de octubre y hasta la primera quincena de noviembre para un control efectivo de la plaga.

Os recordamos que, dicho tratamiento mediante endoterapia, nos ayuda en la  prevención de los posibles ataques de escolítidos, como el Tomicus spp.